Con una herramienta como el API de Google Maps uno tiene la oportunidad de poner sobre un mapa o imagen satélite cualquier dato que pueda geoposicionarse. Esta API ayuda a organizar la información de manera geográfica, un paso más en el objetivo de Google de organizar la información mundial. Pero en lo que respecta a nosotros, los desarrolladores, tenemos tres modelos a la hora de usar esta API:

Usar información ya existente: La primera opción es usar una base de datos de elementos geoposicionados (o que tengan una dirección física), por ejemplo, anuncios inmobiliarios tomados de otras web. Esta opción es relativamente sencilla de hacer ahora que muchos sitios web tienen RSS o APIs y permiten su uso a terceros. Además, desde el primer día, el mash-up se podrá utilizar porque tendrá datos. Sin embargo, el reto en este caso es conseguir una interfaz revolucionaria que suponga una mejora sustancial respecto a la interfaz de la fuente original de los datos. Esa interfaz solo se podrá conseguir si existen escenarios de uso donde la visualización en un mapa sea una ventaja clara respecto a una interacción tradicional textual, y no solo un complemento. Una variante más avanzada de este modelo que le añade valor es integrar fuentes de datos no tan fáciles de conseguir creando un buen motor de indexación de terceras partes.

Generar información posicionada: Esta opción trata de geoposicionar información que hasta ahora no había sido geoposicionada y típicamente a través de las contribuciones de los usuarios, por ejemplo, lo que hace Panoramio, la gente sube sus fotos y las geoposiciona. Es una opción más compleja porque no solo supone crear un mash-up y un buen sistema de visualización de esa información, sino también una comunidad de usuarios que genere la suficiente actividad. No solo tiene un punto crítico sino dos, arrancar la comunidad y generar una buena interfaz, pero en conjunto tiene mucho más valor porque ofrece información geoposicionada que es única y no está disponible en otras fuentes.

Modelo mixto: Por último se puede ir a un sistema combinado donde se extraen datos de terceras partes automáticamente y a partir de ahí se intenta generar comunidad, por ejemplo, permitiendo a los usuarios comentar esos datos. Este modelo contiene datos desde el primer día y la web no aparece vacía inicialmente como una comunidad, lo que es una ventaja. Por contra pienso que es complicado que la gente se motive a comentar y valorar contenidos "fríos" extraídos de una base de datos y no de un humano, pero si se hace bien puede conseguirse, de hecho hay varios proyectos que lo consiguen como Geonames.org.

Mi favorito, por supuesto, es el segundo modelo, el que seguimos en Panoramio. ¿Qué modelo preferís vosotros? Creo que puede haber un debate interesante en los comentarios.